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el drama de una familia

Entre la burocracia y la vida: OSECAC Formosa demora cirugía urgente por errores administrativos

Una paciente de Laguna Naineck espera desde hace días los clips que necesita para una intervención que podría salvarle la vida, mientras la obra social dilata los plazos por negligencia en el trámite

La desesperación crece en los pasillos del Hospital de Alta Complejidad "Presidente Juan Domingo Perón" de Formosa, donde una paciente oriunda de Laguna Naineck lucha contra el reloj después de haber sufrido un ACV y un aneurisma.

La desesperación crece en los pasillos del Hospital de Alta Complejidad "Presidente Juan Domingo Perón" de Formosa, donde una paciente oriunda de Laguna Naineck lucha contra el reloj después de haber sufrido un ACV y un aneurisma. Su vida pende de un hilo, pero también de la eficiencia —o más bien, la falta de ella— de OSECAC Formosa.


El caso expone con crudeza las fallas de un sistema que antepone el papeleo a la urgencia médica. Desde el 5 de noviembre se solicitaron los clips necesarios para realizar la cirugía que podría salvar a la paciente. Sin embargo, el trámite quedó suspendido por un error que resulta tan simple como indignante: la obra social realizó mal el escaneo de la solicitud.


Mientras los profesionales médicos del hospital están listos para intervenir, y mientras la familia aguarda con angustia cada actualización, OSECAC repite una y otra vez el mismo mensaje tranquilizador: "El pedido llega en cualquier momento, hay que rezar". Pero ese momento nunca llega.


Lo que resulta aún más indignante es la respuesta que los representantes de OSECAC Formosa le dieron a la familia desesperada: que recen, que oren por la paciente. Una sugerencia que, en lugar de acompañamiento, suena a burla cuando proviene de quienes tienen la obligación y la capacidad de resolver el problema con una simple gestión administrativa correcta. ¿Rezar? Sí, pero también hacer el trabajo por el cual la obra social recibe aportes mensuales.


La negligencia es evidente. No se trata de la complejidad del procedimiento médico ni de la falta de profesionales capacitados. Se trata de un escaneo mal hecho, de un trámite administrativo que debió resolverse en cuestión de horas y que lleva días entrampado en la burocracia de una obra social que parece no comprender —o no querer comprender— que cada minuto perdido es un minuto que la paciente no recuperará.


Ante la gravedad de los hechos y la inacción de OSECAC, la Superintendencia de Servicios de Salud decidió intervenir. El organismo impuso sanciones a la obra social y estableció plazos concretos para que el procedimiento se concrete sin más demoras.


Esta intervención, aunque necesaria, no debería haber sido necesaria. Evidencia el fracaso rotundo de OSECAC Formosa en cumplir con su obligación más básica: garantizar la atención médica oportuna a sus afiliados, especialmente en casos de urgencia vital.


La paciente, oriunda de Laguna Naineck, tuvo que ser trasladada a la capital formoseña ante la gravedad de su cuadro. El ACV hemorrágico y el aneurisma cerebral que padece requieren intervención quirúrgica inmediata. Los clips vasculares que necesita son el único recurso que puede detener el sangrado y evitar nuevas complicaciones que podrían resultar fatales.


Su condición es crítica. Cada hora que pasa sin la cirugía aumenta exponencialmente el riesgo de secuelas neurológicas irreversibles o, en el peor de los casos, de perder la vida. Los médicos del Hospital de Alta Complejidad han advertido sobre la urgencia extrema del procedimiento, pero sus manos están atadas sin los insumos que OSECAC debe proveer.


Para la familia, oriunda también de Laguna Naineck, la situación es doblemente angustiante. No solo deben enfrentar la posibilidad de perder a su ser querido, sino que deben hacerlo lejos de su hogar, en la ciudad capital, mientras lidian con una obra social que parece no comprender la gravedad del momento.


Mientras OSECAC Formosa se jacta en su silencio institucional, una mujer de Laguna Naineck lucha cada día en una cama de hospital, esperando que los clips que necesita desesperadamente lleguen antes de que sea demasiado tarde. Su caso debe servir como un llamado de atención urgente sobre la necesidad de reformar un sistema que, cuando más importa, suele fallar a quienes dice proteger.


La paciente continúa internada esperando los insumos necesarios para su cirugía.