Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.elcomercial.com.ar/a/47764
Avanza la investigación por el crimen que conmocionó a Villa 213

Procesaron con prisión preventiva a la madre y al padrastro de la niña María Maidana

La Justicia confirmó el procesamiento de Rosalía Maidana y Néstor Pérez, acusados por el homicidio de la pequeña de cinco años hallada sin vida y enterrada en una bolsa de arpillera a una cuadra de su casa. La causa está caratulada como homicidio calificado por el vínculo, con alevosía y ensañamiento.

María Maidana tenía 5 años y fue brutalmente asesinada en Villa Dos Trece. Su abuela había denunciado su desaparición.

El brutal crimen de María Maidana, la niña de cinco años que fue hallada sin vida el pasado 22 de abril en la localidad de Villa 213, tuvo un importante avance judicial. El juez de Instrucción N°2, Sergio Felipe Cañete, resolvió dictar el procesamiento con prisión preventiva para Rosalía Maidana, madre de la víctima, y su pareja Néstor Ramón Pérez, quienes continuarán detenidos mientras la causa avanza hacia el juicio oral.

En contacto con Radio Uno, el abogado querellante Jorge Pesolano, representante de la abuela de la niña, Sunilda Esquivel, confirmó que el fallo judicial es "contundente y suficiente", destacando que la calificación legal aplicada por el magistrado "se ajusta a la gravedad de las conductas desplegadas por ambos imputados".

Según se desprende del expediente, Rosalía Maidana fue procesada por homicidio calificado por el vínculo, alevosía y ensañamiento, en tanto que Pérez enfrenta cargos por homicidio agravado con los mismos agravantes y en el marco de violencia de género, conforme a los incisos 1, 2 y 11 del artículo 80 del Código Penal. La pena en expectativa para ambos es prisión perpetua.

El cuerpo de la niña fue hallado en una zona rural de Colonia Weitzel, a poco más de mil metros de su vivienda. Estaba enterrado dentro de una bolsa de arpillera, lo que dio origen a una intensa investigación que se inició tras la denuncia de su abuela, quien alertó a la Policía porque hacía varios días que no veía a la pequeña y que tampoco asistía al jardín de infantes.

Los peritos forenses determinaron que la menor murió como consecuencia de una fuerte sacudida que le provocó la rotura de las vértebras cervicales, una lesión compatible con un episodio de extrema violencia. De acuerdo con los investigadores, María habría sufrido reiterados maltratos físicos y psicológicos dentro de su propio hogar, en un contexto familiar signado por el aislamiento y el silencio.

Pesolano explicó que, en esta etapa, "ya quedan muy pocas pruebas por producir", ya que la instrucción se encuentra prácticamente cerrada y la acusación está firme. "Veremos si la defensa intenta aportar elementos nuevos, pero el procesamiento es sólido, con prueba suficiente y calificación adecuada", señaló el abogado en diálogo con Radio Uno.

El caso provocó una profunda conmoción en la comunidad de Villa 213, donde vecinos y familiares realizaron múltiples marchas en reclamo de justicia por María. La imagen de la pequeña, sonriente y vestida con su guardapolvo, se transformó en un símbolo del pedido de protección a la infancia y de lucha contra la violencia intrafamiliar.

La investigación continúa bajo la órbita del Juzgado de Instrucción N°2, y se espera que en los próximos meses la causa sea elevada a juicio oral. Entretanto, la abuela de la víctima, quien impulsó la denuncia inicial, sigue participando activamente como querellante particular, decidida —según sus propias palabras— a "llegar hasta las últimas consecuencias para que la muerte de mi nieta no quede impune".