La crisis en el país golpea también a las apuestas tradicionales
En un recorrido realizado por Radio Uno en la conocida Agencia Carlitos, ubicada en la peatonal Rivadavia, el propietario Carlos Almirón describió la difícil situación que atraviesa el rubro de los juegos de azar tradicionales en Formosa.

"Las ventas están muy reducidas, los sueldos están bajísimos y casi nadie llega a fin de mes. Eso repercute en todo", comentó Almirón, quien señaló que la merma es notoria en juegos como el Telequino, el Kini Seis y el Loto.
El empresario recordó que antes vendían hasta 2.500 cartones semanales de Telequino, mientras que hoy apenas llegan a 900 u 800, una caída que atribuye tanto al encarecimiento del cartón —actualmente en $1.700— como a la pérdida de poder adquisitivo de la gente.
"Siempre se juega, porque al formoseño le encanta apostar, pero con montos más chicos. Ya no hay el movimiento de antes. Antes teníamos muchísimos más clientes", dijo el propietario de la tradicional agencia.

Almirón también se refirió a la competencia que representan las apuestas online y los casinos virtuales, aunque reconoció no tener datos certeros sobre cuánto influyen en la baja de ventas: "Sé que existen y que mucha gente apuesta desde el teléfono, pero no tengo idea de qué cantidad".
Pese al escenario adverso, la agencia mantiene el entusiasmo entre sus clientes. Incluso, recientemente se vendió allí un boleto de Telequino con un premio de $1.700.000, que aún espera a su ganador o ganadora para ser cobrado dentro del plazo de 30 días.
"Nos mantenemos justitos porque el local es propio, de lo contrario sería imposible", cerró Almirón, reflejando en sus palabras la tensión entre la tradición de las apuestas en familia y los nuevos tiempos marcados por la crisis económica y la virtualidad.