Mattia Canepa: "Somos la generación que nació con Insfrán en el poder y tiene la obligación de sacarlo"
Hijo de la reconocida dirigente Gabriela Neme, Canepa intenta marcar una diferencia con un mensaje claro: renovación generacional, control de gestión y soluciones concretas para los vecinos.
Mattia Canepa, candidato a concejal por el sublema Viva Formosa Libre (parte del llamado "equipo naranja"), busca abrirse camino en un Concejo Deliberante dominado por la reelección. Hijo de la reconocida dirigente Gabriela Neme, Canepa intenta marcar una diferencia con un mensaje claro: renovación generacional, control de gestión y soluciones concretas para los vecinos.
"Hoy hablar con alguien que no es concejal es noticia", dijo en diálogo con Radio Uno, destacando que mientras muchos candidatos buscan su "re, re, reelección", él apuesta a un equipo nuevo, que trabaja todo el año, no solo en campaña.
Entre las banderas que levanta Canepa están las denuncias de corrupción en la gestión provincial, a la que acusa de usar fondos públicos para fines personales, como la compra de camionetas con dinero del fondo fiduciario. "La plata está, solo falta la decisión política de control para que llegue al vecino", asegura.
Uno de los barrios que menciona como ejemplo es La Alborada, donde los habitantes llevan más de 25 años sin acceso a agua potable ni servicios básicos. "El Estado presente de ellos es la cartelería, no la solución de fondo", ironiza, criticando a la gestión oficialista que, según él, prioriza la propaganda antes que las obras.
Desde lo legislativo, Canepa propone instalar ordenanzas de participación popular, donde los vecinos puedan decidir directamente en qué se invierte el presupuesto municipal. Además, proyecta incentivar la fabricación local de adoquines para mejorar las calles y así generar empleo y movilidad. "La sociedad va a avanzar cuando el Estado esté donde tiene que estar: resolviendo la cloaca, la calle, el acceso al hospital, no dependiendo del clima para poder vivir tranquilo", remarca.
Finalmente, el joven arquitecto se posiciona como una cara nueva, más allá del apellido. "No vengo a rellenar zapatos grandes, vengo a proponer otra cosa. Somos la generación que nació con Insfrán en el poder y tiene la obligación de ser la que lo saque".
