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nueva fecha tentativa para el remate es el 21 de mayo

Las lluvias obligan a postergar remate ganadero en Formosa: "No estamos disconformes, pero los caminos están muy mal"

Las intensas lluvias caídas en los últimos días sobre algunos sectores de la provincia de Formosa obligaron a suspender varios remates ganaderos, entre ellos el organizado por la consignataria Dall´Osso     e Hijo, que tenía fecha prevista para el próximo 15 de mayo.

Walter Dall’osso estuvo con Radio Uno

Walter Dall´Osso, referente de la firma, confirmó la medida en diálogo con Radio Uno, señalando que la decisión busca dar tiempo a que el clima mejore y los caminos rurales se tornen transitables para poder movilizar y encerrar la hacienda sin mayores complicaciones.

"Suspendemos más que nada previendo que se mejore el tiempo, para tener una semana por lo menos de tiempo bueno", explicó. "Los caminos están muy mal, los corrales también, entonces tratamos de darle un poco más de tiempo para poder trabajar. Si no, se hace muy complicado", añadió el consignatario.
Según precisó Dall´Osso, las lluvias más intensas se registraron en zonas como Palo Santo, Bañadero y Perín, donde el agua caída complicó seriamente las tareas del campo. No obstante, aclaró que no todas las regiones fueron afectadas de igual forma.

"El oeste viene excelentemente bien. En cambio, en el este falta mucha agua, los esteros están secos. Por eso, estas lluvias vienen bárbaro acá, no vienen para nada mal", destacó.
A pesar del exceso puntual en algunas zonas, el productor remarcó que la mayoría de los campos necesitaban agua, y que el problema actual se limita a cuestiones logísticas.

"Si no fuera por el tema de los caminos, la verdad que nos viene bárbaro la lluvia. No nos podemos quejar, si no, nos quejaríamos de llenos", expresó en tono resignado.
La nueva fecha tentativa para el remate es el miércoles 21 de mayo, siempre y cuando las condiciones climáticas acompañen.

"Le vamos a dar una semana al clima, a ver si nos perdona", cerró con esperanza.
Mientras tanto, el sector ganadero aguarda con cautela la evolución del clima, en un año donde, tras varias temporadas de sequía, el agua vuelve a caer como una bendición… aunque con algunos tropiezos.