Fenómenos atípicos azotan Formosa: registros de más de 300 milímetros en algunas localidades
Las intensas precipitaciones que se vienen registrando en distintas localidades de Formosa han sorprendido a los habitantes y generado preocupación en las comunidades afectadas. Registros de hasta 300 milímetros de agua han sido informados en zonas como Palo Santo, Perín y el centro-oeste de la provincia, acumulaciones que superan ampliamente los niveles habituales para esta época del año.
Fernando Alegre, representante de la estación meteorológica de Las Lomitas, explicó en diálogo con Radio Uno que estas lluvias responden al ingreso de un frente frío en niveles altos de la atmósfera, lo cual, sumado a una masa de aire cálido y húmedo, desencadenó tormentas de gran magnitud en toda la región. Según Alegre, las precipitaciones se mantendrán hasta el mediodía, con una mejora paulatina hacia la tarde, y se espera que mañana el clima sea más estable.
"Lo que estamos viendo en las imágenes satelitales es una masa nubosa muy alta, con temperaturas en la parte superior de hasta 80 grados bajo cero, lo que indica tormentas intensas y de gran desarrollo vertical. En Palo Santo, por ejemplo, ya se registraron más de 250 milímetros desde la madrugada y sigue lloviendo con fuerza", detalló el meteorólogo.
Las imágenes satelitales confirman esta situación, mostrando el sureste de la provincia sumergido en el núcleo convectivo más intenso. Localidades como El Colorado y el sur de Pirané presentan manchas negras en los mapas satelitales, reflejo de precipitaciones abundantes y persistentes.
Alegre también destacó que este tipo de tormentas no es común para esta época del año. "Estamos teniendo un año atípico. Las temperaturas que vemos son más propias de principios de otoño que de finales, y sumado a la humedad, se están generando estos fenómenos fuera de lo habitual", comentó.
Las consecuencias de estas precipitaciones masivas son visibles en el día a día de las localidades afectadas. El agua acumulada en un metro cuadrado equivale a 300 litros en ciertas zonas, lo cual complica la vida y el trabajo cotidiano de los habitantes.
Con la perspectiva de una mejora gradual, las autoridades y pobladores se mantienen alerta, esperando que el clima permita una recuperación pronta y sin mayores complicaciones.
