Massa rechazó el acuerdo Mercosur-UE y acusó a Europa de "exportar sus problemas al mundo"
Desde Paraguay, rechazó la transición energética europea: "No nos vamos atar a la agenda de quienes buscan escapar del condicionante del gas ruso", reprochó.

Sergio Massa se reunió en Asunción con el presidente de Paraguay, Santi Peña, en una cumbre en la que se abordó como tema central el retraso de Argentina en el envío de fondos de Yacyretá.
LPO reveló en una primicia exclusiva de gran impacto en Paraguay que Massa congeló el envío de esos fondos por pedido del propio Peña hasta que no reemplazara al presidente de la entidad, el ex presidente Nicanor Duarte Frutos, rival suyo en la interna colorada.
En la conferencia de prensa al término de la reunión en la residencia oficial de Mburuvicha Roga en esta ciudad, Massa tuvo la delicadeza de evitar comprometer a Peña al ser consultado sobre el freno de los pagos. "Lo hice porque Peña pidió una auditoría", se escapó. Pero este miércoles el propio Peña había reconocido que pidió a Massa frenar esas transferencias hasta que pudiera reemplazar a Duarte Frutos.
Pero más allá de la discusión sobre el flujo, Massa abordó con Peña la situación por la deuda de 4500 millones de dólares por Yacyretá que Paraguay le debe a la Argentina y fue acordada por Macri con Horacio Cartes en 2018 y duerme en el Congreso argentino porque el peronismo cree que la verdadera deuda es casi el doble y Macri cedió para cerrar con el ex presidente paraguayo un negocio de distribución de energía para Yacylec, la empresa atribuida a su familia.
Massa reveló que la Argentina analiza proponer que esa deuda se colateralice para que Paraguay empiece a saldarla. "Más allá de los flujos, hay una deuda de stock que Argentina espera que se resuelva y trabajamos con el Presidente para impulsar mecanismos colaterales que ayuden a Argentina sin complicar la vida de los paraguayos".
"Peña conoce bien los mecanismos colaterales de mercado para que no afecten las cuentas paraguayas. Respecto al flujo de intercambio de energía hay un saldo pendiente del 2022, son 86 mil millones de pesos argentinos que se cancelan en los próximos 4 meses en un programa acordado con Paraguay y estaba pendiente", agregó.
Massa también aprovechó una pregunta para marcar un giro importante en la posición oficial de la Cancillería argentina respecto al acuerdo con la Unión Europea. Massa pidió olvidarse de ese tratado, que en efecto lleva trabaja más de veinte años, para negociar país por país.
Tema que estaba fuera de la agenda bilateral con Peña y seguramente será discutido nuevamente en la cumbre del Mercosur que se realizará en diciembre en Brasil.
En línea con las críticas que viene expresando Lula por las restricciones que buscan imponer los europeos con argumentos ambientales, Massa dijo"el Mercosur tiene que empezar a avanzar en acuerdos individuales con los países de la Unión Europea".
"Cuando miramos a la UE como bloque vemos que tienen intereses muy divergentes. Francia va a seguir defendiendo los subsidios agrícolas y limitando la posibilidad de nuestros productores de ingresar a esos mercados. Los que defienden la agenda de transición energética y energía renovables sin reconocer al gas como energía de transición nos van a pretender poner límites y Argentina va a defender al gas como energía de transición porque tenemos en Vaca Muerta la posibilidad de darle gas a Paraguay, Brasil, Uruguay y a Chile energía barata por los próximos 120 años", enfatizó.
Massa insistió con que "el desarrollo de nuestra región depende de que tengamos la capacidad de aprovechar esos recursos. No nos vamos atar a la agenda de transición de quienes quieren escapar del condicionante que representa el gas ruso a sus economías y pretenden exportar sus problemas al resto del mundo".
"El gas es energía de transición, queremos que Paraguay y su industrias tengan gas barato y vamos apostar a que el desarrollo de nuestra infraestructura nos permita que Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Chile tenga a posibilidad de acceder al gas barato de Vaca Muerta para competir industrialmente desde esta región", finalizó.
Como adelantó LPO, Lula que decidió asumir la centralidad del éxito o fracaso de esta rubrica. En la cumbre de Puerto Iguazú, el brasileño mostró los dientes y habló de un acuerdo "inaceptable" y trató de "arrogantes" a los europeos por las restricciones ambientales que incluyeron en la ley que prohíbe la venta de productos de zonas deforestadas.
Lula, en señal de tensión, había declinado la invitación a participar de la cumbre Celac-UE en Bruselas pero al día siguiente de la cumbre del Mercosur, tuiteó que había conversado con Pedro Sánchez, presidente pro-tempore de la UE, y confirmó su predisposición para conversar sobre el acuerdo comercial.
Como reveló en exclusivo LPO, Lula quiere mostrar avances en la cumbre del Mercosur que se realizará en Brasil en diciembre como parte de la construcción de su hegemonía sudamericana. Sin embargo, las restricciones ambientales y la protección a la política agraria de países como Francia, Polonia, Hungría e Irlanda siguen siendo elementos complejos para el avance. Lula envió un borrador a Argentina, Uruguay y Paraguay que establece el levantamiento de barreras ambientales y más margen para algunos sectores estratégicos en compras gubernamentales, como en el sector de la salud.
Massa se alineó con esta posición y contradice lo que viene planteando la propia Cancillería que, en los últimos meses, viene dando muestras de acercamiento con Bruselas.
(La Política On - LinE)